ECONOMÍA CHILENA

Nueva sorpresa en la velocidad de alza de los precios confirma un panorama inflacionario más desafiante.

El alza del IPC de enero superó ampliamente las expectativas del mercado, confirmando el deterioro en la situación inflacionaria y la prolongación de la aceleración que se apreció durante gran parte de 2021. Ello fue principalmente consecuencia del impacto asociado a la escalada del tipo de cambio desde mayo de 2021 y la presión de demanda tras la fuerte y rápida recuperación del gasto. A ello se sumó el fuerte aumento en el precio del petróleo, el hecho que el precio internacional de los alimentos alcanzó su nivel más alto en 10 años y el alza en los costos de bienes de insumo productivos, en un contexto en que las disrupciones en los canales de abastecimiento a nivel global se han acentuado. Las cifras también revelan un alza generalizada entre las principales agrupaciones, confirmando que las presiones se han extendido a lo largo de la canasta del IPC, acentuando el riesgo de una inflación persistentemente alta. Dado el deterioro en la mayoría de los factores generadores de inflación, la tasa de inflación anual probablemente alcanzará un peak cercano al 9,2% a mediados de año y esperamos se modere hacia un 5,9% a fines de 2022.

Gráfico N° 12: Inflación Anual

El Banco Central (BC) manifestó una mayor preocupación inflacionaria y evaluó un alza de 175pb en su reunión de enero.

En la minuta correspondiente a la reunión de política monetaria de enero, el BC concluyó que las cifras recientes apuntan hacia presiones inflacionarias algo mayores que las previstas, acotando que no espera una desaceleración significativa en el próximo semestre, especialmente en la medida subyacente. Ello, frente a una brecha de actividad que sigue siendo positiva y una intensificación de las presiones de costos externos.

El Consejo advirtió que los riesgos para la evolución de la inflación seguían siendo significativos, en un contexto en que el alza anual de los precios y sus perspectivas son elevadas. A partir de ello, los consejeros coincidieron en la necesidad de continuar en el corto plazo el proceso de ajuste monetario, Para ello, evaluaron la posibilidad de incrementar la TPM en 125pb, 150pb o 175pb. En todo caso, la totalidad de los miembros se inclinó por la segunda opción, mencionado que ello se hacia cargo de la intensificación de los riesgos y de una inflación mayor a la esperada.

El mensaje del BC manifestado en la minuta, la nueva sorpresa inflacionaria y el deterioro en las perspectivas de alza de precios, nos lleva a estimar un alza de la tasa de 175pb en la reunión de marzo y otra de 100pb en la reunión de mayo, llevándola a un 8,25%.