Los grandes déficits fiscales y el acelerado crecimiento de la deuda hacen inevitable un alza de la carga tributaria.
Dicha discusión ya comenzó en el Congreso, de forma tal que durante la presente semana la Comisión de Constitución de la Cámara aprobó la propuesta inicial que consideraba un impuesto único de un 2,5% a quienes tengan un patrimonio superior a US$22 millones. Sin embargo, durante la tramitación se sumaron nuevas indicaciones, como la eliminación de exenciones tributarias y aumentar el impuesto de primera categoría de 27% a un 30% a grandes empresas que facturen más de UF1 millón durante dos años. Además, se planteó aplicar un impuesto sobre las ganancias de capital a las personas con mayores ingresos.
En tanto, el proyecto del tercer retiro de fondos previsionales sigue avanzando.
La Cámara aprobó el proyecto de un tercer retiro de los fondos de pensiones, cuyos lineamientos son muy similares al primero. Estimamos que ello generará una salida cercana a los US$11.000 millones y que su efecto sobre el PIB será de 0,9 puntos porcentuales, lo que ya está incorporado en nuestra actual proyección de crecimiento anual de un 5,9%. También veremos una presión alcista sobre las tasas de interés (la que probablemente será neutralizada por una intervención del BC) y efectos bajistas sobre el mercado accionario (entre 2% y 4%) y el tipo de cambio ($10 a $15). En todo caso, dichos efectos serán de naturaleza transitoria.
El Banco Central de Chile reafirma su mayor optimismo.
La minuta correspondiente a la última reunión de política monetaria dio cuenta de una retórica más optimista respecto al reciente desempeño de la economía y a sus perspectivas. Sin perjuicio de ello, los miembros coincidieron en que, si bien las perspectivas para la economía habían mejorado, la convergencia de la inflación a la meta en el horizonte de política requería que la política monetaria siguiera siendo altamente expansiva. Adicionalmente, acordaron que los factores de riesgos eran significativos, y que “…se debía seguir muy atentos tanto a la evolución de las condiciones sanitarias como de la recuperación económica”. En este contexto, y respecto a la evolución de la TPM, se indicó que todo hacía prever que la TPM seguiría en su nivel mínimo durante varios trimestres más, acotando que, en la mayoría de los escenarios analizados, no se anticipaban alzas durante el 2021. Finalmente, el Consejo clarificó que el retorno a una política monetaria tradicional no requería que las medidas no convencionales se extinguieran de forma previa.